El término fue utilizado por primera vez por Chris Anderson en 2004 para referirse a tipos de negocios y modelos económicos como Amazon.
Con el advenimiento de las nuevas tecnologías, las leyes de distribución y mercado han cambiado. Ya no es preciso focalizar el negocio en determinados (y pocos) productos de éxito. Gracias a la reducción en el costo de almacenamiento y distribución, existen dos niveles de mercado. Por un lado, un mercado centrado en el alto rendimiento de pocos productos. Pero también, aunque menos familiar, se abre paso otro mercado basado en la acumulación de todas las pequeñas ventas de muchos productos.
De esta forma, estamos frente a la posibilidad de brindar un servicio a un target específico, segmentado, sectorizado. Se trata de llegar al nicho del mercado. El usuario tiene la posibilidad de encontrar en la Web lo que desea, aunque no se trate de un producto masificado, gracias a la variedad.
Es el momento en el cual el mal llamado “proveedor” se pone a completa disposición del usuario, para así poder brindarle todo aquello que el busca, desde el libro más vendido en el mundo, hasta aquel más inalcanzable y desconocido.
Tal como lo muestra el gráfico, estamos frente al antiguo mercado de masas, representado por la cabeza, donde encontramos pocos productos pero con alto rendimiento, como por ejemplo los bestsellers. De lo contrario, la larga cola representa al nuevo nicho de mercado, donde la prima la variedad.
Por eso, nuestra conclusión es que la larga cola nos habla más de un mundo inmerso en una diversidad que de uno en el que prima únicamente lo abundante.
Con el advenimiento de las nuevas tecnologías, las leyes de distribución y mercado han cambiado. Ya no es preciso focalizar el negocio en determinados (y pocos) productos de éxito. Gracias a la reducción en el costo de almacenamiento y distribución, existen dos niveles de mercado. Por un lado, un mercado centrado en el alto rendimiento de pocos productos. Pero también, aunque menos familiar, se abre paso otro mercado basado en la acumulación de todas las pequeñas ventas de muchos productos.
De esta forma, estamos frente a la posibilidad de brindar un servicio a un target específico, segmentado, sectorizado. Se trata de llegar al nicho del mercado. El usuario tiene la posibilidad de encontrar en la Web lo que desea, aunque no se trate de un producto masificado, gracias a la variedad.
Es el momento en el cual el mal llamado “proveedor” se pone a completa disposición del usuario, para así poder brindarle todo aquello que el busca, desde el libro más vendido en el mundo, hasta aquel más inalcanzable y desconocido.
Tal como lo muestra el gráfico, estamos frente al antiguo mercado de masas, representado por la cabeza, donde encontramos pocos productos pero con alto rendimiento, como por ejemplo los bestsellers. De lo contrario, la larga cola representa al nuevo nicho de mercado, donde la prima la variedad.
Por eso, nuestra conclusión es que la larga cola nos habla más de un mundo inmerso en una diversidad que de uno en el que prima únicamente lo abundante.
